10. Malditos bastardos

                                                                    
Hoy toca una joya del gran, único e inimitable Quentin Tarantino. Malditos Bastardos (literalmente "Bastardos sin Gloria", que la verdad es que suena mucho mejor), nos introduce en la Segunda Guerra Mundial al más puro y sangriento etilo del maestro de Tenesee. Se trata de una producción 100% Tarantino. Para películas profundas sobre la lucha con los nazis ya tenemos un montón muy buenas, pero la perspectiva de Malditos Bastardos solo la disfrutareis en esta película. Acción, argumento gamberro y litros de sangre (algunos menos de los habituales) para una producción brutalmente divertida
La interpretación de Christopher Waltz resulta tan redonda como en Django y Brad Pitt no le va a la zaga. La fina crueldad del coronel Landa contrasta con la violencia deslenguada del teniente Aldo Raine y sus carismáticos bastardos. Todo ello aderezado con la diversión de ver nazis masacrados a tiros. Hay venganzas muy largas. De echo estoy seguro que Tarantino se lo pasó bomba haciendo esto, casi parece el gancho de la peli, agujerear unos sucios culos nazis. Una cinta divertida en un marco distinto al ganagstereo de Pulp Fiction y Reservoir Dogs. Una muestra de la gran evolución del cineasta detrás de Kill Bill. Un 8/10 en el molonómetro para Malditos Bastardos. Nada más por hoy, por décima vez, que el cine os acompañe